En este libro se recogen varias aportaciones en torno a un tema central: el desafío que deben afrontar los historiadores en la medida en que, además de dedicarse a la investigación, han de desempeñar una labor docente y, como tal, de comunicacion en la sociedad actual, caracterizada precisamente por la avalancha informativa y la proliferacion de noticias falsas, tambien conocidas como "bulos" o "fake news". Los capitulos giran en torno a la necesidad de revalorizar nuestra disciplina cientifica, la identificacion de herramientas alternativas para la enseñanza de la historia en las aulas, y un compendio de buenas practicas educativas cuyo fin no es otro que demostrar que otra historia es posible, no para alejarnos de nuestras raices cientificas, sino para dirigirnos al publico actual en un lenguaje que le resulte familiar y, al mismo tiempo, presentarnos como alternativa clara, rigurosa y objetiva, a otras noticias e informaciones de dudosa veracidad.