¿Quieres tomarte un café en la barra de un bar donde se encuentran reunidos Franz Kafka, Gregor Samsa (fugado de La metamorfosis), Groucho Marx y Karl Marx? Un bar que puede estar en Londres, o Viena, o Setagaya, cerca de Tokio. ¿Puedes imaginar las delirantes discusiones? ¿Puedes imaginarlas en un estado donde la realidad y los limites de la existencia saltan por los aires?. Una mezcla de generos tan particular que nombrar tan solo uno de ellos puede ser considerado blasfemia.