Urbano Ferrer Santos

INDICE / ACCIÓN, DEBER, DONACIÓN: DOS DIMENSIONES NSEPARABLES DE LA ACCIÓN: Urbano Ferrer Santos / LA ACEPTACIÓN O EL RECHAZO DEL DON: Aquilino Polaino-Lorente/ RELEVANCIA DE LA DONACIÓN: Blanca Castilla de Cortazar/ DE LA FENOMENOLOGIA Y HERMENEUTICA DE LA ACCION A LA ETICA DEL DEBER Y LA DONACION: Antonio Francisco Amo Polo/ DON Y GRATUIDAD: UNA CONSIDERACION DESDE LA PERSONA: Jose Maria Carabante / SOBRE EL DON Y LA SOLEDAD: Rafael Gomez Perez/ HACIA UNA ETIOLOGIA DE LA DONACION: Jose Andres-Gallego/ SOCRATISMO Y MODERNIDAD EN LA FUNDAMENTACION DE LA ETICA: Rafael Alvira/ ACCION, MORALIDAD Y DONACION: LOS TRES EJES FENOMENOLOGICOS DEL ULTIMO LIBRO DE URBANO FERRAR: Mariano Crespo/ NOTAS A UNA LECTURA: Jose Angel Agejas/ LA IDENTIFICACION DE LA EXPERIENCIA MORAL: Lino Iglesias Martinez/ UN DIALOGO AMABLE CON LA TRADICION ANTIGUA Y MEDIEVAL: Salvador Antuñano Alea/ LA POLITICA COMO UN ESPACIO GENUINAMENTE PERSONAL: Antonio Ramon Miñon Saenz/ RECUERDOS DE UN PROFESOR Y AMIGO: Jose Luis Yepes Hita/ LA ACCION ECONOMICA EN SU DIMENSION SOCIETARIA: LA DIMENSION HUMANA DE LA ECONOMIA: Santiago Garcia Echevarria/ A MODO DE EPILOGO: Urbano Ferrer Santos

Tomando por guía la acción, el presente libro analiza en sus dos primeras partes las vertientes fenomenológico- eidética, hermenéutica y ética de la acción en diálogo con los autores clásicos y contemporaneos que mas representativamente las han abordado (Tomas de Aquino, Ricoeur, Polo, Scheler, Wojtyla..). El autor muestra que no son estadios superpuestos, sino que se puede transitar del analisis eidetico al hermeneutico a traves del agente motivado en sus actos voluntarios y de las mediaciones cultural e historica de su actuacion y se desemboca al fi n en el nivel etico cuando se repara en la exigencia de universalizacion que reivindica la accion en tanto que humana. La tercera parte aborda las dos fuentes eticas de la donacion y la obligacion, resaltando la convergencia de ambas desde el primado de la donacion. Para ello Urbano Ferrer cuenta con los relevantes estudios sobre el don procedentes del area francesa (Mauss, Marion, Derrida, Bruaire..) y termina enmarcandolo constitutivamente en la persona. No pretende una sintesis de diferentes planteamientos, sino dejarse llevar por las cosas mismas en sus conexiones de esencia y traer a colacion a proposito de ellas las averiguaciones de los autores aludidos, ejerciendo la critica desde el contraste con las evidencias de esencia.

Tomando por guía la acción, el presente libro analiza en sus dos primeras partes las vertientes fenomenológico-eidética, hermenéutica y ética de la acción en diálogo con los autores clásicos y contemporaneos que mas representativamente las han abordado (Tomas de Aquino, Ricoeur, Polo, Scheler, Wojtyla...). El autor muestra que no son estadios superpuestos, sino que se puede transitar del analisis eidetico al hermeneutico a traves del agente motivado en sus actos voluntarios y de las mediaciones cultural e historica de su actuacion y se desemboca al fin en el nivel etico cuando se repara en la exigencia de universalizacion que reivindica la accion en tanto que humana.La tercera parte aborda las dos fuentes eticas de la donacion y la obligacion, resaltando la convergencia de ambas desde el primado de la donacion. Para ello Urbano Ferrer cuenta con los relevantes estudios sobre el don procedentes del area francesa (Mauss, Marion, Derrida, Bruaire...) y termina enmarcandolo constitutivamente en la persona. No pretende una sintesis de diferentes planteamientos, sino dejarse llevar por las cosas mismas en sus conexiones de esencia y traer a colacion a proposito de ellas las averiguaciones de los autores aludidos, ejerciendo la critica desde el contraste con las evidencias de esencia. Esta segunda edicion amplia en especial la tercera parte, cubriendo algunas de las lagunas que se le señalaron autorizadamente al autor tras la publicacion de la primera edicion.

Nos hallamos ante un libro de Filosofia es cierto, cuyas implicaciones para la doctrina social de la Iglesia, sobre todo a partir de Benedicto XVI son, obvias; basta volver a enumerar los tres conceptos que le dan titulos: la accion, el deber y la donacion

El libro se centra en la producción husserliana, todavía por explorar. Una de las tesis que en él se defienden es que las cuestiones de Teoría del Conocimiento no gozan de la exclusiva; y esto no sólo porque los continuadores de Husserl (Max Scheler, Edith Stein, Adolf Reinach, Hans Reiner o Dietrich von Hildebrand) hayan prestado atención preferente a otras áreas, sino que ya en el propio Husserl se ha ido haciendo patente cada vez más, que por lo menos la Antropología y la Ética habían sido asiduamente cultivadas desde su perspectiva fenomenológica. Por otro lado, con este libro se pretende responder a la necesidad de disponer de un texto que exponga de modo resumido y articulado el conjunto de la filosofía de Husserl.

LA ÉTICA DE EDMUND HUSSERL trata de recoger la doctrina ética de Edmund Husserl (1859-1938), con la idea de dar a conocer el contenido moral que encierra la rica obra husserliana. Además, constituye una buena introducción a quienes se aproximan a la filosofía del fundador de la fenomenología, y un buen servicio incluso para quienes ya conocen su pensamiento solamente en relación con la teoría del conocimiento o con la lógica. Concretamente, la ética de Husserl —en un cuidado y ajustado equilibrio entre el papel de la razón, el de la voluntad y el del sentimiento— ofrece la posibilidad de rescatar la afectividad del sentimentalismo ciego e instintivo sin caer en el extremo contrario del racionalismo inhumano; enseña cómo tomar libre y realmente nuestra vida en nuestras propias manos y dirigirnos a un ideal personal; muestra cómo comportarnos con nuestros semejantes reconociéndolos en su verdadera dignidad, y cómo podemos ayudarnos los unos a los otros. Y para todo ello, en fin, nos proporciona el suelo seguro de la experiencia interna evidente, resistente a toda crítica procedente de la ciencia empírica o del cinismo posmoderno. La exposición del discurso ético pasa necesariamente por meandros psicológicos y antropológicos, como no podía ser de otra manera. De modo que la doctrina moral de Husserl desvela asimismo e inseparablemente un sustancioso contenido psicológico y antropológico. Por otra parte, se ha preferido mantener en general el estilo fenomenológico del autor, esto es, procediendo analíticamente en sucesivos niveles de profundidad.

EL PRINCIPIO ANTROPOLÓGICO DE LA ÉTICA responde a la necesidad de ofrecer una base antropológica a la Ética, que permita orientarse en la variedad de conceptos con alcance moral (deber, obligación, felicidad, libertad, persona, bien). A este respecto, el autor encontro que el tratamiento zubiriano del hecho moral no atiende tanto a las teorias eticas cuanto al arraigo antropologico del mismo, por lo que decidio adoptarlo como guia. Pero como toda la obra de Zubiri forma un conjunto compacto, se vio en la necesidad de hacer no pocas incursiones en cuestiones colindantes, solo a primera vista ajenas al tema de este estudio, como la temporalidad, la aplicacion de los sistemas al viviente o la religacion. Al fin, Urbano Ferrer logra ofrecer al lector, de un lado, una vision sintetica de los cimientos antropologicos de la moralidad, destacando las innegables aportaciones de Zubiri en dialogo con los pensadores clasicos y, de otro lado, se inician vias para despejar algunos flancos que esa vision deja abiertos, tales como la teleologia en los actos humanos, los habitos morales, la prevalencia del futuro o la libertad trascendental de la persona.