En esta historia... ¡el cronómetro corre más que tú!¿Quién dijo que madrugar fuese sano? Yo, desde luego, no. Salgo a correr por Ratonia y… ¡PUM!: la ciudad entera está empapelada con la sonrisa de M
Un loro bocazas, un robo millonario… ¡y Geronimo al rescate!¡Chocolate caliente, sofá y manta! Ese era mi plan en la tarde más gélida del invierno… hasta que mi primo Trampita apareció con un papagay