Aristòfanes (Atenes, 446-386 aC) és el poeta còmic més brillant de l’antiguitat i un dels més hilarants de tota la literatura universal. Com Èsquil, Sòfocles i Eurípides per a la tragèdia, era, ja per als grecs, el gran clàssic de la comèdia antiga. Gràcies a Zeus, n’hem conservat onze peces de la quarantena llarga que sabem que va compondre. Li va tocar viure una de les èpoques més crítiques per a la democràcia atenesa: la guerra del Peloponès (431-404 aC), que va comportar la fi del domini d’Atenes sobre l’Egeu. Però va sobreviure a la guerra, i ens va llegar algunes de les comèdies més meravelloses que ha escrit mai cap dramaturg, com les d’aquest volum o "Lisístrata", "Les granotes" i "Les dones a l’assemblea". Com tots els genis, va dur als límits el gènere que conreava, fins a esgotar-lo. Darrere d’ell no es va tornar a escriure comèdia de la mateixa manera i el seu verb alat només l’han igualat monstres literaris de la talla de Shakespeare, Rabelais o Gadda.
PLATÓN. (Atenas o Egina,2 ca. 427-347 a. C.) fue un filósofo griego seguidor de Sócrates y maestro de Aristóteles. En 387 fundó la Academia, institución que continuaría su marcha a lo largo de más de novecientos años y a la que Aristóteles acudiría desde Estagira a estudiar filosofía alrededor del 367, compartiendo, de este modo, unos veinte años de amistad y trabajo con su maestro. Platón participó activamente en la enseñanza de la Academia y escribió, siempre en forma de diálogo, sobre los más diversos temas, tales como filosofía política, ética, psicología, antropología filosófica, epistemología, gnoseología, metafísica, cosmogonía, cosmología, filosofía del lenguaje y filosofía de la educación; intentó también plasmar en un Estado real su original teoría política, razón por la cual viajó dos veces a Siracusa, Sicilia, con intenciones de poner en práctica allí su proyecto, pero fracasó en ambas ocasiones y logró escapar penosamente y corriendo peligro su vida debido a las persecuciones que sufrió por parte de sus opositores. Su influencia como autor y sistematizador ha sido incalculable en toda la historia de la filosofía, de la que se ha dicho con frecuencia que alcanzó identidad como disciplina gracias a sus trabajos.