La piscina es para Coll un lugar maravilloso: además de no oír la voz machacona de una madre que la quiere perfecta, allí se encuentra con el chico de sus sueños. Unos sueños que se harán realidad y Coll no sólo conseguirá que Art le dirija la palabra, sino que le pida para salir. Pero no es oro todo lo que reluce, como le recuerda su fiel amiga Val, y esta vez habrá que darle la razón. Encuadernación: rústica.