Este libro nace de la voluntad de superar el derrotismo indignado para pasar a defender las razones de la convicción. Sus autores comparten una preocupación sincera por la deriva populista de la situación política en Cataluña pero, sobre todo, la desazón y la melancolía ante la tibieza con que los ciudadanos partidarios de la convivencia y la unidad respondían usualmente al pleito soberanista.Así se gestó esta obra, como un intento de poner algo de razón y de sentido común en un debate viciado por la propaganda y el populismo. Un libro que ofreciera argumentos sólidos a aquellos que abogan por la permanencia de Cataluña en España. Un libro que presentara las razones de la unidad y analizara críticamente el proceso desde muchos ángulos: el derecho nacional e internacional, la economía, la historia y la cultura, los medios de comunicación, etc. Una obra de estas características es una aventura y, más allá de su mayor o menor éxito en número de ejemplares vendidos, ha servido para crear lazos y forjar amistades. El independentismo espasmódico ha logrado lo que no habían conseguido los treinta años de pujolismo: aunar a personas de procedencias ideológicas muy distintas en torno a una empresa común, la de defender un proyecto de convivencia en el marco de una España plural frente al populismo imperante en Ca...