Inspirándose en el último artículo del Símbolo de los apóstoles, «creo en la vida eterna», en este libro el cardenal Martini nos introduce en el corazón de la fe y de la esperanza cristiana: la vida después de la muerte, el juicio, la resurrección. Su refl exión parte del miedo a la muerte, que es un instinto inextirpable, pero que no debe convertirse en angustia que paraliza la mente y el corazón. Agarrándose totalmente a Jesús, después de un sincero camino de conversión, todo hombre puede encontrar la fuerza necesaria para superar el miedo y mirar con confianza el destino que le espera. Ahora que el cardenal Martini ha sido llamado a salir al «encuentro del Señor resucitado», estas páginas adquieren el carácter de un testamento espiritual destinado a dejar profundas resonancias.
Ficha técnica
Traductor: Roberto Heraldo Bernet
Editorial: Editorial San Pablo
ISBN: 9788428541145
Idioma: Castellano
Número de páginas: 160
Tiempo de lectura:
3h 44m
Encuadernación: Tapa dura
Fecha de lanzamiento: 06/11/2012
Año de edición: 2012
Plaza de edición: Es
Colección:
Caminos
Caminos
Número: 48
Alto: 21.0 cm
Ancho: 13.5 cm
Especificaciones del producto
Escrito por CARLOS MARIA MARTINI
Carlo Maria Martini (Orbassano, Turín, 15 de febrero de 1927 - Gallarate, Lombardía, 31 de agosto de 2012) fue un jesuita, profesor de teología, arzobispo de Milán, cardenal de la Iglesia católica. En la corriente de los cambios del post-Concilio, siguió la línea marcada por la Compañía de Jesús en sus últimas décadas. Nació en el suburbio turinés en el seno de una familia burguesa, hijo de padre ingeniero. Ingresó en la Compañía de Jesús (jesuitas) el 25 de septiembre de 1944, a los 17 años de edad. Hizo el noviciado en Cuneo; estudió en la Facultad de Filosofía Aloisianum, Gallarate, Milán; en la Facultad Teológica de Chieri, en Turín; en la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma (en 1958 recibió el doctorado en teología fundamental con la tesis: "Il problema storico della Risurrezione negli studi recenti"); y en el Pontificio Instituto Bíblico, Roma, donde obtuvo otro doctorado con una tesis sobre "El problema de la recensionalidad del códice B a la luz del papiro Bodmer XIV". Martini fue ordenado sacerdote en 1952 y comenzó una carrera fulgurante, tanto en el ámbito académico como en el eclesiástico. Martini era experto en la crítica textual del Nuevo Testamento y había estudiado los papiros y códices que contienen el texto griego de los Evangelios. Martini obtuvo varios doctorados y dominaba seis idiomas modernos, además del latín, del griego y del hebreo clásicos.