Los diez años de encuentros cinematográficos producidos alrededor de la Mostra Internacional de Films de Dones de Barcelona (Muestra Internacional de Filmes de Mujeres de Barcelona), cuya primera edición se realizó en 1993, han generado una amplia serie de debates en torno a la aportación creativa de los cineastas y su implicación en la definición de un nuevo paisaje cinematográfico que está renovando los parámetros estéticos de este medio.