A finales de la década de los años veinte se encontró en el barrio parisino de Saint-Denis el cadáver, brutalmente despedazado, de una mujer. El crimen, y su estremecedor parecido con los cometidos años antes por Jack “el destripador”, despertaron la curiosidad del poeta y periodista Robert Desnos, que decidió investigar a su vez la historia de aquel legendario asesino del Londres victoriano. En última instancia, Desnos quería demostrar que los procedimientos de los criminales sádicos no habían cambiado desde “el destripador” y para ello estudió, con las dotes de un monstruo mitad forense y mitad literato, los detalles y las variaciones de cada uno de aquellos homicidios. Este trabajo vio la luz a través de una serie de nueve artículos periodísticos sobre Jack “el Destripador” publicados en Paris-Matinal entre los meses de enero y febrero de 1928, y que ahora por primera vez se traducen al castellano. En todos ellos, tanto el ambiente del Londres de la época como los pormenores de los crímenes son descritos de forma magnífica y reveladora. Además, Desnos propone a sus lectores a lo largo de esta serie una suerte de intriga paralela que va hilándose de un texto a otro y que avanza, finalmente, una suerte hipótesis sobre la verdadera identidad de este asesino que nunca fue juzgado…
Ficha técnica
Traductor: Irene Antón
Ilustrador: David Sánchez
Editorial: Errata Naturae Editores
ISBN: 9788493637453
Idioma: Castellano
Número de páginas: 64
Encuadernación: Tapa dura
Fecha de lanzamiento: 17/11/2008
Año de edición: 2008
Plaza de edición: Madrid
Colección:
Fuera de colección
Fuera de colección
Alto: 24.0 cm
Ancho: 20.0 cm
Especificaciones del producto
Escrito por ROBERT DESNOS
En los años veinte entró en contacto con los superrealistas, de cuyo grupo formó parte destacada hasta 1929, en que rompió con Breton. En los treinta, su actividad creativa se orientó perfectamente hacia la radio, en la que combinó de manera innovadora lo literario con lo musical. En los cuarenta, durante la ocupación alemana, formó parte de la resistencia, siendo detenido por la Gestapo en febrero de 1944 e internado en diversos campos de concentración, en el último de los cuales, el de Terezin, en Checoslovaquia, murió en junio de 1945 a los pocos días de su liberación.