Este importante volumen recoge el metodo y el afán de san Agustín como pedagogo y catequista. Menos las dos primeras obras, La inmortalidad del alma y La música, todas las demás pertenecen principalmente a la pastoral catequetica de san Agustín, actividad que ejerció con mucha frecuencia duran-te cuarenta años. Él es quien acuña la palabra catecismo, quien aclara la cuestión de los "misericordiosos" deshaciendo sus errores, y quien recomienda y desarrolla el diálogo de preguntas y res puestas en La catequesis a los principiantes, con resúmenes de la historia sagrada y de la historia de la Iglesia, brindando riquísimas intuiciones pedagógicas. Algunas obras son resúmenes de las verdades cristianas: quizás la más representativa por su brevedad sea La fe y el Símbolo de los Apóstoles; tambien des taca por su concisión Sermón a los catecúmenos sobre el Símbolo de los Apóstoles. Y en Sermón sobre la disciplina cristiana expone una regla práctica de vida cristiana.
Ficha técnica
Traductor: Lope ... [Et Al.] Cilleruelo
Editorial: Biblioteca de Autores Cristianos
ISBN: 9788422013327
Idioma: Castellano
Número de páginas: 776
Tiempo de lectura:
18h 37m
Encuadernación: Tapa dura
Fecha de lanzamiento: 01/12/1988
Año de edición: 1988
Plaza de edición: Madrid
Colección:
NORMAL
NORMAL
Serie/Saga: BAC
Número: 499
Alto: 20.0 cm
Ancho: 13.0 cm
Grueso: 13.0 cm
Peso: 580.0 gr
Especificaciones del producto
Escrito por San Agustín de Hipona
San Agustín, obispo de Hipona (345-430), refleja en su vida y en su obra el cambio del Mundo Antiguo a la cosmovisión cristiana. Tras su conversión al cristianismo, admirablemente descrita en sus Confesiones, fue un incansable buscador de la verdad. Amar, pensar y vivir suponían para él los tres vértices del triángulo de la existencia. San Agustín fue el abanderado de la empatía previa al conocimiento intelectual. Como maestro de vida y sabiduría aconsejó el desapego del bullicioso mundo, con sus fastos, honores y ambiciones como la vía idónea para llegar a ser personas completas. Y el amor universal como la mejor solución de conflictos y la más excelsa de las prácticas. Su notable influencia marcó, además del mundo medieval y el Renacimiento, el pensamiento de autores tan modernos y contemporáneos como Descartes, Rousseau, Kierkegaard, Wittgenstein o Hannah Arendt.