E.T.A. Hoffmann es uno de los romáticos alemanes más conocidos en Europa. La mezcla de lo cotidiano y lo fantástico, de lo humano y lo animal, de fantasmas y figuras de rasgos grotescos, la ironía y los efectos teatrales presentes en sus cuentos han cautivado a los lectores. Su polifacética personalidad, marcada siempre por graves dificultades económicas y graves problemas de salud, se vio truncada por una muerte relativamente temprana, no sin antes satisfacer uno de los sueños de su vida: el estreno en Berlín de la ópera Undine. En La atalaya del primo, publicada en 1822, Hoffmann administra con moderación de enfermo los ingredientes habituales de su obra, al tiempo que añade una reflexión sobre el papel del "ojo", la mirada y la perspectiva en la creación literaria. Esa experiencia, "los principios básicos del arte de mirar", se transmite al lector en forma de diálogo al modo platónico, mientras se observa el ajetreo en un día de mercado en Berlín de principios del siglo XIX. Ésta es la primera versión al español de este punto culminante en la obra de Hoffmann. El presente volumen se completa con un brevísimo relato, Candidez, y con La curación, que supone un regreso de Hoffmann a temas y motivos de su época en Bamberg: el magnetismo como método científico con aplicaciones terapeúticas y la obra de Calderón y los infructuosos intentos de estrenar una òpera basada en una de sus comedias, La banda y la flor
Ficha técnica
Editorial: Krk Ediciones
ISBN: 9788496476806
Idioma: Castellano
Número de páginas: 128
Tiempo de lectura:
2h 58m
Encuadernación: Tapa blanda
Fecha de lanzamiento: 24/05/2006
Año de edición: 2006
Plaza de edición: Oviedo
Alto: 17.0 cm
Ancho: 12.0 cm
Peso: 100.0 gr
Especificaciones del producto
Escrito por E.T.A. Hoffmann
Ernst Theodor Amadeus Hoffmann (Königsberg, 1776 – Berlín, 1822). Escritor y compositor alemán. Hijo de un abogado, su tercer nombre era originalmente Wilhelm, pero más tarde adoptó el de Amadeus en honor a Mozart. Estudió derecho en Königsberg. Vivió en Varsovia, donde creó una orquesta y se dedicó a componer. En 1814 aceptó el cargo de Consejero de Justicia del Tribunal de Berlín, sin que por ello se resintiera su ingente producción literaria de aquellos años. Su fama se debe más a su obra como escritor que a sus composiciones. Adscrito al Romanticismo, donde más destacó su gran personalidad fue en sus cuentos fantásticos, en los que se mezclan el misterio y el horror, y que han alcanzado fama universal. En ellos crea una atmósfera en ocasiones de pesadilla alucinante y aborda temas como el desdoblamiento de la personalidad, la locura y el mundo de los sueños, que ejercieron gran influencia en escritores como Víctor Hugo, Edgar Allan Poe y el primer Dostoievski.