Pieza fundamental en la literatura hispanoamericana, "La Edad de Oro" es, al mismo tiempo, uno de los libros menos apreciados y menos difundidos de esa literatura. La explicación de esa paradoja es muy simple; cuando se le menciona se añade: libro para niños. Una vez más los prejuicios cierran la puerta al conocimiento y mal hieren a la realidad. Porque no hay libro más profundo, más cuidadosamente confeccionado, en lo literario como en lo conceptual, que esta obra de Jose Martí, el hombre menos frívolo, la persona que se tomó en serio cuanto hacía y que se dirigía a los niños para guiar con tacto exquisito su razón y sus razonamientos.