Lo que tiene el lector entre sus manos y puede hojear u ojear, incluso leer, no es la obligada Memoria de Excavaciones, que en su momento se realizó, aunque no bajo los cánones preceptivos, sino la remembranza, también memoria, de una excavación y como todas las memorias tiene siempre algo de selectivo y sesgado, supongo. No en la materialidad de los documentos, que aquí se recopilan, sobre todo mosaicos, pinturas y otros restos, por primera vez publicados de manera orgánica y en color, sino en su intrahistoria e infortunio, como reza el título de la obra.
Ficha técnica
Editorial: Centro de Estudios Benaventanos Ledo del Pozo