RUMBO A LA SALUD AMBIENTAL PLANETARIA Y A UN MUNDO NUEVO

El desafío urgente de cuidar y proteger el planeta lleva consigo la ineludible necesidad de aunar esfuerzos por parte de todos los seres humanos que lo habitamos en la búsqueda de un desarrollo sostenible e integral, ya que está en nuestras manos el que las cosas cambien y el poder revertir esta situación, siempre y cuando cambiemos nuestra actitud y nuestro comportamiento a través de hábitos saludables y sostenibles. Quiero pensar que la humanidad aún posee la sensibilidad suficiente y la capacidad de colaborar poniendo cada uno su granito de arena para salvaguardar el planeta, que es patrimonio común, mejor legado para las generaciones venideras. Las nuevas generaciones reclaman un cambio, y no podemos construir un futuro mejor sin tener en cuenta la problemática ambiental que afecta a la civilización actual y que pone de manifiesto la crisis “ambiental, humanitaria y de valores” que atraviesa la sociedad, y que tiene entre sus exponentes principales: el deterioro global del planeta, las desigualdades sociales y el sufrimiento de los excluidos, aspectos todos ellos inaceptables desde un punto de vista ético y moral, que debemos afrontar y combatir con urgencia y buscar soluciones para revertir esta situación a la mayor brevedad posible