Carolina Coronado, escritora y poeta, dejó su impronta en el siglo XIX pues fue pionera de la igualdad y abrió las puertas del mundo intelectual a las mujeres. Aguerrida y firme, la extremeña hizo girar el sentido de la Historia, al convertirse en brujula de su marido, el diplomatico americano Justo Horacio Perry, a quien apoyo en el ejercicio de su profesion. Amante del progreso y de los inventos, emprendio junto a su esposo la aventura del cableado submarino trasatlantico con la ilusion de evitar en el futuro muchas guerras. Amiga de la reina Isabel II y cortejada por la elite politica y literaria, ofrecio su salon, escenario de frecuentes tertulias, como un refugio del pluralismo ideologico. Con sus escritos y con la denuncia de sus versos, se rebelo ante las injusticias. Y su voz pudo oirse al otro lado del oceano cuando, simpatizando con la causa del presidente Lincoln, abandero la abolicion de la esclavitud en America.
Al evocar el nombre de María Moliner, una palabra aflora en el horizonte de nuestra memoria: diccionario. Pero el Diccionario de uso del español -su obra magna escrita en soledad y reconocida por escritores universales, que avaló su candidatura frustrada a la Real Academia Española- es sólo la punta del iceberg de una pasión por las palabras amalgamada con una voluntad de titanes por una mujer de una gran calidad humana y profesional. No es resquemor por el olvido de una labor dilatada y silenciada lo que descubrirán nuestros lectores al desgranar las páginas de este libro, sino admiración y reconocimiento por la contribución a la socialización de la cultura de nuestra profesora, filóloga y lexicógrafa, trazada en su Plan de Bibliotecas y en las lecturas de las Misiones Pedagógicas, cuya acción solidaria hizo felices a los campesinos españoles, ignorantes del progreso, alejados, olvidados y escondidos en aquel ignoto mundo rural de la primera mitad del siglo XX.
Con un relato semi policial, la autora nos va a ir descubriendo un mundo apasionante de enredos, robos y desapariciones de importantísimos tesoros literarios, en el que el principal protagonista es un manuscrito robado en la epoca de los Medicis aparecido
Sofonisba Anguissola Ponzoni (Cremona, hacia 1532-35; Palermo, 1625) fue una insigne pintora del Renacimiento, celebrada por contemporáneos de la talla de Vasari y Miguel Ángel. Debido a la prohibicion de que las mujeres firmasen sus obras, muchos de sus cuadros han sido atribuidos a pintores masculinos como El Greco, Sanchez Coello o Tiziano y solo en las ultimas decadas se esta reconociendo su verdadera autoria. Estuvo en la Corte de Felipe II como dama de compañia de Isabel de Valois y, gran retratista, dejo una galeria de retratos de la familia real española, Su obra hoy se en- cuentra presente en muchos de los grandes Museos europe- os y otros del mundo. Este libro pretende contribuir a la recuperacion de su memoria y de su gran legado artistico.