La biografía y la obra de Jean-Paul Sartre son la historia de una conversión lenta y dolorosa del "individualismo" a una comprensión "social" de la subjetividad. En el trascurso de esta historia, los desplazamientos que afectan su concepción de lo humano, de la ética y de la política se entrecruzan con una variación fundamental que se refiere a la cuestión del sentido y el valor de la existencia. Distanciándose progresivamente de la afirmación inicial del absurdo radical de la existencia (la experiencia de "la náusea"), Sartre descubre que la existencia sin sentido es una producción social, caracterizada por el derrumbe de la relación con los otros. Este libro se propone reconstruir la historia de este descubrimiento, explicitando sus efectos en el terreno ético y político.
El libro intenta responder a la pregunta: ¿qué relación existe entre las representaciones de la alteridad, de lo ético y del sentido de la existencia? Apoyándose en una arqueología del modo de representación de la alteridad que estructura el pensamiento colonial y postcolonial en América desde el propio "descubrimiento", este libro se propone mostrar la importancia central de la experiencia del estar-con-el-otro para la definición de una ética universalista. En el desarrollo de este programa, que reúne análisis histórico y reflexión crítica, se busca al mismo tiempo abrir nuevas perspectivas para una mejor comprensión de los hechos ocurridos en torno a 1492.