El señor O navega en su barco, transita islas, conoce monstruos, ve ballenas, y llega a una isla muy particular, donde recordará su pasado. La gente toda usa sombreros, la gente toda va con prisas. El Señor O decide recorrer la isla y llega a una playa donde solo ve a un niño que construye una y otra vez una gran torre de arena. Su deseo no es hacer una torre alta sino llegar al cielo, y ¡volar!
El Señor O tiene un problema desde que es pequeño: todo el mundo puede ver sus pensamientos. De modo que, en la adultez, decide usar un gran sombrero que no permita a nadie ver lo que piensa. Pero no sera tan facil para el Señor O controlar sus poderosos pensamientos, sobre todo al conocer a la Señorita I, de quien se enamorara locamente y a partir de lo cual, perdera completamente el control de los pensamientos que habitan sobre su cabeza. Cansado y rendido, decide ir a consultar con un medico que le receta tomarse unas vacaciones al mar. El Señor O no solo ira por primera vez al mar, sino que alli tendra una revelacion que resolvera su conflicto
El Señor O tiene un problema desde que es pequeño: todo el mundo puede ver sus pensamientos. De modo que, en la adultez, decide usar un gran sombrero que no permita a nadie ver lo que piensa. Pero no será tan fácil para el Señor O controlar sus poderosos pensamientos, sobre todo al conocer a la Señorita I, de quién se enamorará locamente y a partir de lo cual, perderá completamente el control de los pensamientos que habitan sobre su cabeza. Cansado y rendido, decide ir a consultar con un médico que le receta tomarse unas vacaciones al mar. El Señor O no sólo irá por primera vez al mar, sino que allí tendrá una revelación que resolverá su conflicto…