La interpretación de la ley se ha convertido en los últimos años en uno de los paradigmas principales de la investigaciónen el ámbito de la teoría del derecho. En el presente estudio, Marmor muestra como surgio este interes a partir de la teoria semantica del derecho, introducida por Dworkin, que cambio en buena medida el panorama tradicional de la concepcion del derecho. Comparando las posiciones anteriores, por ejemplo de Hart, con las de Dworkin y sus partidarios, el autor reconstruye en un diferenciado analisis criticoeste cambio metodologico y sus principales consecuencias. La cuestion del sentido de la ley y de su interpretacion, asi como la ambiguedad de ciertos casos legales exigen una precision de lo que debe ser el consenso sobre las condiciones de la validez del derecho. Examinando el concepto de interpretacion de Dworkin y sus bases epistemologicas, Marmor descubre una serie de incoherencias logicas que pueden llevar a la teoria y la practica del derecho a un relativismo peligroso que, en realidad, resulta innecesario desde el punto de vista logico y linguistico.Con el argumento de que la interpretacion no es mas que un recurso de excepcion dentro de la concepcion estandar del lenguaje y de la comunicacion, Marmor defiende que la interpretacion solo afecta los aspectos de la comprension insuficientemente determinados por las leyes y convenciones respectivas.
La interpretación de la ley se ha convertido en los últimos años en uno de los paradigmas principales de la investigación en el ámbito de la teoría del derecho. En el presente estudio, Marmor muestra como surgio este interes a partir de la teoria semantica del derecho, introducida por Dworkin, que cambio en buena medida el panorama tradicional de la concepcion del derecho. Comparando las posiciones anteriores, por ejemplo de Hart, con las de Dworkin y sus partidarios, el autor reconstruye en un diferenciado analisis critico este cambio metodologico y sus principales consecuencias. La cuestion del sentido de la ley y de su interpretacion, asi como la ambiguedad de ciertos casos legales exigen una precision de lo que debe ser el consenso sobre las condiciones de la validez del derecho. Examinando el concepto de interpretacion de Dworkin y sus bases epistemologicas, Marmor descubre una serie de incoherencias logicas que pueden llevar a la teoria y la practica del derecho a un relativismo peligroso que, en realidad, resulta innecesario desde el punto de vista logico y linguistico.Con el argumento de que la interpretacion no es mas que un recurso de excepcion dentro de la concepcion estandar del lenguaje y de la comunicacion, Marmor defiende que la interpretacion solo afecta los aspectos de la comprension insuficientemente determinados por las leyes y convenciones respectivas.