Ser ciudadano significa ser reconocido como sujeto de derechos en todos los ámbitos de la vida. La globalización económica, la dependencia política de esta globalización y los fenómenos migratorios del último siglo están generando fuerzas contrarias a la realización de los ideales de las declaraciones de los derechos humanos. Frente a la retórica creciente que surge en torno a ellos es preciso profundizar en una visión crítica y rigurosa que pueda dar nuevo vigor a los movimientos políticos ciudadanos que reclaman su aplicación efectiva.
Pier Paolo Pasolini (Bolonia, 1922-Ostia, 1975) es conocido como poeta, cineasta, novelista, dramaturgo y crítico. Pero también como autor de una importante producción ensayística recogida en numerosas publicaciones y en libros como El caos, Escritos corsarios y Cartas luteranas (Trotta, 1997). Una fuerza del pasado toma en consideración el conjunto de la obra de Pasolini para reconstruir y analizar las principales líneas de su pensamiento social. En todo momento se ha respetado la propia voz del autor, al tiempo que se ha examinado su proyección sobre el presente, pues Pasolini propuso una reflexión social innovadora cuya importancia sólo hoy empieza a valorarse plenamente.