Para Artemio Rodríguez, el arte del grabado es un quehacer cotidiano en el que forma e idea, experiencia personal y concepto histórico conviven armoniosamente. Su trabajo habla del artista mestizo que fusiona el espiritu indigena americano con la tradicion estetica europea. Este libro es testimonio de su prodigioso talento para crear imagenes de increible refinamiento y de su excepcional dinamismo y energia.