La historia de Joy Division, Siouxsie & The Banshees, The Cure, Bauhaus, The Sisters of Mercy, Killing Joke, The Cult, Echo & The Bunnymen, The Birthday Party, Nick Cave & The Bad Seeds, The Cramps, The Gun Club, Lydia Lunch, Soft Cell, Magazine, Theatre of Hate, New Model Army, Joolz, These Immortal Souls, Crime & The City Solution, Diamanda Galas, Einsturzende Neubauten, Virgin Prunes, Cocteau Twins, Danielle Dax, Cardiacs y muchos mas...Con el eco todavia audible de los alaridos e improperios del punk, que arremetio contra el establishment, el buen gusto y la industria musical a mediados de los setenta, un grupo de jovenes desencantados que recibio su impacto empezo a fraguar una nueva hornada de bandas que se extendio a partir de 1978 por toda Gran Bretaña y mas alla. Siouxsie Sioux, parte del conocido como Contingente de Bromley que escandalizo a todo el pais cuando aparecio acompañando a los Sex Pistols en el Today de Bill Grundy, dio con una primera formacion de los Banshees para registrar su primer single, Hong Kong Garden, mas o menos cuando Joy Division, desde Manchester, se dieron a conocer con Shadowplay a traves del programa de television de Tony Wilson con un Ian Curtis contoneandose como un poseso y The Cure lanzaron Killing an Arab, con ecos del existencialismo de El extranjero de Camus. Un año despues, en Northampton, los Bauhaus de Peter Murphy rindieron homenaje al mito del cine de terror con Bela Lugosis Dead, que parecio volver a la vida con la espeluznante guitarra de Daniel Ash, y desde Leeds, The Sisters of Mercy, liderados por el clarividente Andrew Eldritch, lanzaron en su propio sello The Damage Done, el embrion de los hits crepusculares que no tardarian en llegar. Nacia asi una nueva escena musical que acabaria siendo conocida como rock gotico, y que acogeria en su seno otras derivaciones siniestras, como el pyschobilly de The Cramps o The Gun Club.Con un espiritu igualmente combativo que el del punk que los antecedio y alumbro, pero con unas letras mas tintadas de poesia y de oscuros referentes literarios, los heroes y heroinas de este libro empezaron a incubar desde sus dormitorios un estilo de guitarras hirientes, bajos estentoreos y voces cavernosas (o a veces etereas) que darian lugar a algunos de los himnos mas imperecederos de los ochenta, a la par que, con el atuendo negro, el pelo crepado que popularizaron Siouxsie, Robert Smith y Nick Cave y una imagineria propia del mas lobrego cementerio, se hicieron eco del descontento social propiciado por el gobierno conservador de Margaret Thatcher y su paulatina criba de los derechos sociales y laborales.Como afirma en el prologo Ana Curra de Paralisis Permanente, el grupo español que mejor supo empaparse de todo lo que estaba sucediendo desde ultratumba, Cathi Unsworth disecciona y entreteje con ojos alquimicos una inspirada y laberintica tela de araña, y pone en contexto planos sociopoliticos, geograficos y culturales para erigir a los hijos del angel caido y rendir tributo con esta carta de amor a todos sus protagonistas.
Ver más