A principios de la pasada década de los sesenta, el teórico Christian Metz tuvo una idea que luego resultaría trascendental para los estudios cinematográficos: lo que él llamaba el objeto-cine debía abordarse con las armas de la lingüística, dotando a la disciplina así fundada de un rigor puramente científico. Más allá de la mera crítica periodística, pues, la semiología aportaba a la reflexión sobre el cine una dimensión teórica, algo que hasta entonces había estado fuera de su alcance.El abordaje de este �objeto-cine� desde la perspectiva del psicoanálisis se inscribe, para Metz, en el mismo campo de investigación y se sitúa en idéntico nivel. No se trata de psicoanalizar a los autores o a sus criaturas, sino de enfrentarse al cine entendido como institución y arte específico, como un �significante� que opera en la región de lo �imaginario�, tanto con ritos de repetición como con procedimientos tecnológicos. El significante imaginario, convertido automáticamente en un clásico desde su aparición en 1977, es en el fondo el doble pseudónimo del cine visto desde una perspectiva freudiana.
La presente recopilación, aparecida en 1968 y objeto desde entonces de múltiples reediciones, reúne diez estudios de Christian Metz publicados entre 1964 y 1968 en diversas revistas -Communications, La Linguistique, Cahiers du cinéma...— y actualmente traducidos ya a doce idiomas. Este primer tomo de los Ensayos sobre la significación en el cine suponen una primera etapa en el esfuerzo de Christian Metz por fundamentar un enfoque semiológico del hecho cinematográfico: una tentativa que sigue abierta y que tuvo su continuidad en el segundo tomo de esta obra, originalmente editado en 1974 y también publicado por Paidós, y en Lenguaje y cine (1971). El presente volumen constituye el inicio de dicho itinerario, el primer encuentro entre modalidades de pensamiento inspiradas por la lingüística moderna y por la tradición estética de las reflexiones sobre la noción de "lenguaje cinematográfico".Dice François Jost en el prólogo: "Si tuviera que escoger algunos libros de cine entre los escritos teóricos producidos durante el siglo XX, escogería sin dudarlo los Ensayos sobre la significación en el cine, y los colocaría en el mismo estante de mi biblioteca en el que están Eisenstein o Bazin. Como ellos, Metz pertenece efectivamente a la especie rara de los "fundadores de discursividad", que Foucault definía así: "Tienen esto en particular: no son solamente los autores de sus obras, de sus libros. Han producido algo más: la posibilidad y la regla de formación de otros textos"".
Este segundo volumen de los Ensayos sobre la significación en el cine, cuya edición original se remonta a 1973, no tiene una relación tan sencilla como pudiera parecer con los textos que componen el primer tomo. La primera parte intenta mostrar de que modo el giro que experimento la deriva de Metz con esta obra, el giro hacia la semiologia, esta firmemente basado -como eco, como sintesis, como reformulacion, como respuesta, como desplazamiento, como rechazo de la amnesia- en sus reflexiones precedentes sobre el hecho cinematografico. En las otras secciones que componen el presente volumen, el lector vera dibujarse, a traves de un fascinante juego de avances y retrocesos autocriticos, continuidades y cambios de rumbo que dan lugar a las directrices aun un poco erraticas de una segunda semiologia que el autor asumiria por completo despues de esta experiencia: el cine como institucion del significante.