Tras una borrachera salvaje que acaba en orgía homosexual y tentativa de suicidio, Bruno Dante es internado por tercera vez en la unidad de alcohólicos y enfermos mentales del Hospital San Giuseppe di Cupertino en el Bronx. Mientras se recupera le llegan malas noticias de la Costa Oeste: su padre, el escritor y guionista Jonathan Dante, con el que nunca se ha llevado bien, está gravemente enfermo y los médicos le dan pocos días de vida. Llamado a rendir un último homenaje al padre, Bruno Dante abandona antes de lo previsto el hospital y emprende un viaje de costa a costa en compañía de su odiada mujer. Un padre genial, rudo y con un carácter horrible: Jonathan Dante. Un hijo lleno de talento que se pierde en el alcohol, el sexo y la depravación: Bruno Dante.
Las vidas de John Fante y de su hijo, Dan Fante, son muy distintas pero muy parecidas en lo esencial: su pasión por la escritura y su debilidad por el alcohol. En Fante. Un legado de escritura, alcohol y supervivencia, Dan Fante traza la historia familiar desde el sur de Italia hasta los barrios de inmigrantes de Colorado y Los Angeles, donde un joven John Fante empecinado en escribir novelas lucha para conseguir reconocimiento literario, hasta que harto de no obtenerlo sucumbe a los suculentos cheques que el Hollywood de la epoca dorada le entrega a cambio de sus guiones. Un padre, John, amargado por el fracaso de su vocacion y con un caracter explosivo; y un hijo, Dan, descubridor precoz de la mala vida que a los veinte años escapa de las tensas relaciones familiares huyendo sin un centimo a Nueva York, son el eje narrativo de unas memorias en las que Dan Fante imprime el ritmo de sus novelas. En Nueva York seguiremos a Dan en su carrera de trabajos extravagantes y hazañas alcoholicas, de la que solo sera rescatado, veinticinco años mas tarde, por la escritura.