Corresponsal en el Medio Oeste de The Economist, con sede en Chicago. Cubre historias en toda la región, pero está especialmente interesado en el gobierno urbano, el crimen, el cambio social y el transporte. También ha cubierto historias sobre todo, desde las guerras en Sudán del Sur y Afganistán hasta el tráfico de drogas en Colombia y la creciente sobriedad de los adolescentes modernos en el mundo rico, pero prefiere escribir sobre ciudades, transporte y transformación social. Estudió historia y economía en la Universidad de Oxford
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En Carmageddon, el periodista Daniel Knowles describe el auge del automóvil y los costos que todos asumimos como resultado de ello. Entretejiendo historia, economía y reportajes, rastrea las fuerzas y decisiones que normalizaron los automoviles y consolidaron nuestra dependencia de ellos. Knowles lleva a lectores por todo el mundo para mostrarles las formas en que el uso del automovil ha impactado la vida de las personas: desde Nairobi, donde pocas personas poseen un automovil pero la ciudad todavia esta envuelta en smog, hasta Houston, donde la autopista Katy Freeway tiene 26 carriles alucinantes y hay 30 plazas de aparcamiento para cada residente, terreno suficiente para ocupar Paris diez veces. Con estos aspectos negativos, Knowles muestra que hay mejores formas de vivir, analizando Çmsterdam, Copenhague, Tokio y Nueva York.
En Carmageddon, el periodista Daniel Knowles describe el auge del automóvil y los costos que todos asumimos como resultado de ello. Entretejiendo historia, economía y reportajes, rastrea las fuerzas y decisiones que normalizaron los automoviles y consolidaron nuestra dependencia de ellos. Knowles lleva a lectores por todo el mundo para mostrarles las formas en que el uso del automovil ha impactado la vida de las personas: desde Nairobi, donde pocas personas poseen un automovil pero la ciudad todavia esta envuelta en smog, hasta Houston, donde la autopista Katy Freeway tiene 26 carriles alucinantes y hay 30 plazas de aparcamiento para cada residente, terreno suficiente para ocupar Paris diez veces. Con estos aspectos negativos, Knowles muestra que hay mejores formas de vivir, analizando Amsterdam, Copenhague, Tokio y Nueva York.