Un año entre los persas es un testimonio vívido y de gran valor que nos muestra el Irán del siglo XIX. El conocimiento por parte del autor de la lengua y la cultura persas unido a su gran curiosidad por Oriente en general y Persia en particular le permitieron introducirse de lleno en la sociedad iraní y escribir un minucioso relato del folclore, el pensamiento y las ideas imperantes en el Irán del siglo XIX. Este hecho hace doblemente importante este testimonio, ya que para comprender el Irán actual es imprescindible conocer la configuración sociopolítica y el entramado religioso de la sociedad iraní de entonces.Sencillo y comunicativo, el profesor Browne se mezcla con todas las capas de la población, mostrándonos así un relato humano. Aprende de todos, y pregunta a todos sin importarle su condición social, desde el derviche mendicante o los vendedores ambulantes hasta la gente de alta alcurnia o incluso el propio príncipe-gobernador.El autor nos transmite un relato pleno de vivencias donde nos muestra con gran lucidez y perspicacia los rasgos específicos que diferencian al pueblo persa, un pueblo que por aquel entonces conservaba aún el aire propio y característico de una nación apenas contaminada por la cultura occidental.
Extraordinaria muestra de la erudición orientalista inglesa de finales del XIX y principios del XX, esta obra con ambición de exhaustividad sobre la antigua cultura persa es tenida aún en muy alta estima entre los actuales estudiosos, pese a contar con mas de un siglo de historia.El libro nos documenta esplendidamente sobre una cultura que solo en apariencia nos es ajena, ya que sus vinculos con asuntos eminentemente occidentales son multiples y sustanciales: el catarismo, procedente del maniqueismo persa; el universo del Zaratustra nietzscheano, inspirado en la figura de Zoroastro; o el gran misticismo hispano del Siglo de Oro, derivado del sufismo tambien de origen persa. Ademas nos habla extensamente de los omeyas, tan determinantes en la futura y mitica cultura del al-Andalus hispano, e incluso, en pasajes concretos sobre los heresiarcas persas, nos evoca algun famoso relato de Borges al respecto.La presente obra tambien ofrece, indirectamente, una pequeña antologia de prosas y poemas persas que sorprenderan por su ingenio y belleza, y que quiza inciten al lector a seguir profundizando en una cultura de la que Edward G. Browne sabe sin duda transmitirnos la gran admiracion que le produce.
Extraordinaria muestra de la erudición orientalista inglesa de finales del XIX y principios del XX, esta obra con ambición de exhaustividad sobre la antigua cultura persa es tenida aún en muy alta estima entre los actuales estudiosos, pese a contar con mas de un siglo de historia.El libro nos documenta esplendidamente sobre una cultura que solo en apariencia nos es ajena, ya que sus vinculos con asuntos eminentemente occidentales son multiples y sustanciales: el catarismo, procedente del maniqueismo persa; el universo del Zaratustra nietzscheano, inspirado en la figura de Zoroastro; o el gran misticismo hispano del Siglo de Oro, derivado del sufismo tambien de origen persa. Ademas nos habla extensamente de los omeyas, tan determinantes en la futura y mitica cultura del al-Andalus hispano, e incluso, en pasajes concretos sobre los heresiarcas persas, nos evoca algun famoso relato de Borges al respecto.La presente obra tambien ofrece, indirectamente, una pequeña antologia de prosas y poemas persas que sorprenderan por su ingenio y belleza, y que quiza inciten al lector a seguir profundizando en una cultura de la que Edward G. Browne sabe sin duda transmitirnos la gran admiracion que le produce.