El fundador de la dinastía fue Manuel Mejías Luján que no tenía antecedentes taurinos, nacido a mediados del siglo XIX en el pueblo extremeño de Bienvenida. Murió a principios del siglo XX. Novillero que llegó a tomar la alternativa, pero que tras ser cogido grave en el Puerto de Santa María, se enfundó el traje de plata.
La caricatura, los toros y Fernando Vinyes es un canto a la amistad, un recuerdo y homenaje al amigo ido. Pero para recordarlo no podía hacerlo en sólo cuatro líneas, y Fernando del Arco decidió estudiar el mundo de la caricatura y plasmarlo en este libro. España y México, los dos amores mundanos de Vinyes, desfilan por esta obra. El autor conoce bien el mundo de los toros en España y ha viajado más de una docena de veces a México conviviendo con toreros, ganaderos y empresarios del país hermano. Su mérito ha sido el saber reflejar la idiosincrasia de los personajes de ambos países a través del nexo de la caricatura y de los toros, centrados en la figura de Vinyes, el mejor caricato taurino que hemos tenido. De existir un Premio Nobel para los caricatos, similar al de los escritores, seguro que lo habría ganado Fernando Vinyes.