La tía Dete ha encontrado un trabajo enFráncfort y no puede hacerse cargo de la pequeña Heidi, a quien lleva a vivir junto asu abuelo, un viejo ermitaño que vive en unacabaña en los Alpes. La niña esta muy ilusionadacon el nuevo entorno pero el abuelo nose muestra muy amable.
Heidi está feliz con su nueva vida en lasmontañas: correr por los prados, cuidarde las cabras, dormir en una cama hecha de heno? Además, vivir con el abuelono está tan mal. La amabilidad y la ternura de la niña estan consiguiendo queel anciano comience a cambiar su caracter.
Ponle color a la inolvidable historia de Heidi. ¡La vida en las montañas es maravillosa! Pedro, el abuelo, Niebla…Cada día está lleno de aventuras. Gracias a las líneas gruesas y en relieve en todas