El tarot nació en Italia en el siglo XIV como un simple juego de cartas. Cuando Carlos V invadió Milán, contribuyó a que se difundiera por toda Europa. La versión que hoy conocemos no empezó a imprimirse de manera masiva hasta el siglo XVIII. Como el resto de las barajas, a veces se utilizaba para la adivinacion, pero nadie pensaba que esa fuera su verdadera (o principal) utilidad. El primero que se uso para la adivinacion fue el tarot de Bolonia, a mediados del XVIII. Pero todo cambio cuando un buen dia entro en escena una figura que nunca puede faltar en el mundo de lo paranormal: el chiflado de turno y sus alegres seguidores.Javier Cavanilles (Valencia, 1969) es licenciado en Ciencias de la Informacion por la Universidad Politecnica de Valencia. Comenzo su carrera profesional en Las Provincias y, tras un breve periodo en Diario 16, se incorporo al equipo fundador de El Mundo en la Comunidad Valenciana como redactor de educacion y ciencia. Es coautor del libro Los caras de Belmez y mantiene el blog Desde el mas alla (mas o menos) en la web de El Mundo.