(Cognac, 1888 - Bazoches-sur-Guyonne, 1979) Es considerado uno de los padres de la Unión Europea. Durante el periodo de entreguerras fue secretario general adjunto de la Sociedad de Naciones (1919-23). Al comenzar la Segunda Guerra Mundial (1939-45) es nombrado presidente del comité franco-británico de coordinación económica. Tras la derrota de Francia por la Alemania nazi concibió un plan para la fusión política entre Francia y Gran Bretaña, que recibió el apoyo de Churchill, pero no encontró eco entre los exiliados de la `Francia libre`. Terminada la guerra, dirigió la elaboración de un plan de equipamiento y reconstrucción económica (el Plan Monnet) que, apoyándose en la ayuda americana del Plan Marshall, permitió a Francia modernizar sus estructuras productivas y relanzar el crecimiento en poco tiempo. Pero, consciente de las limitaciones de los Estados nacionales tradicionales, se aplicó desde entonces a luchar por el ideal europeísta: concibe la primera Comunidad Europea, la CECA, Comunidad Europea del Carbono y del Acero. Con el Tratado de Roma en 1957, la construcción se extiende al Mercado Común. Jean Monnet crea entonces un Comité de acción por los Estados Unidos de Europa que une partidos y sindicatos.
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Prólogo de Jaime Mayor Oreja. A 50 años de la entrada en vigor del Tratado de Roma y a 25 del Tratado de Maastricht, se publica por primera vez en español esta obra de uno de los fundadores de la Unión Europea, Jean Monet. Los europeos se preguntan por la forma que adoptará Europa, esa Europa que desean o temen pero que no dudan será su destino. Los Estados Unidos de Europa, nacidos de una proposición francesa, aceptada por otros cinco países, a comienzos de 1950, se hacen realidad. Desde ese día, los acontecimientos avanzan con la fuerza de las revoluciones al comienzo, fuerza tranquila y ordenada que se puede controlar pero no detener. Ese control está asegurado por la existencia de las primeras instituciones democráticas a las que los europeos han confiado su destino común, y en particular por los representantes de los parlamentos de los seis países reunidos en el seno de una Asamblea Común. Jean Monnet, primer presidente de la Alta Autoridad de la Comunidad Europea del Carbón y del Acero, el hombre al que se ha llamado Monsieur Europe, aporta aquí el testimonio vivo de esta realidad en construcción, al mismo tiempo que un mensaje que abre el camino a los europeos decididos a vivir al ritmo de su tiempo.
La historia sitúa ya a Jean Monnet entre esos hombres del siglo XX que, a través de su acción, han cambiado el destino del mundo y han transformado nuestras condiciones de vida. Sus Memorias, convertidas hoy en obra de referencia imprescindible de líderes y dirigentes, revelan la prodigiosa aventura de un hombre cuya acción fue determinante en cada una de las grandes encrucijadas de la historia contemporánea: la Primera Guerra Mundial, el nacimiento de la Sociedad de las Naciones, la Segunda Guerra Mundial, la implicación americana contra el nazismo, la creación en Argel del Comité de Liberación Nacional, la reconstrucción de Francia, y especialmente, la construcción de una Europa unida. Sus Memorias permiten comprender por qué y cómo a lo largo de toda su vida Jean Monnet puso toda su inquebrantable determinación al servicio de una idea simple: «La paz y la prosperidad sólo pueden alcanzarse por la unión entre los hombres».