Jean Roba, uno de los grandes autores del cómic franco-belga, es conocido principalmente por su serie Bill y Bolita, pero durante catorce años no se limitó a relatar las andanzas de un solo niño (sin olvidarnos de su perro), sino que nos ofrecio las aventuras de una pandilla completa: Phil, Archibald, Grenadine, Dizzy, Atchi y Atcha. Como toda pandilla que se precie, disponen de un local propio; un viejo autobus abandonado en uno de los muchos solares que abundaban por aquel entonces en cualquier barrio de cualquier ciudad y que constituye el mejor de los terrenos de juego. Pero ese terreno sera codiciado por un avido hombre de negocios que, ayudado por los (no tan temibles como ellos creen) Caimanes, a las ordenes de Tatan, intentara arrebatarselo. La Pandilla tendra que poner todo de su parte para evitarlo. Y eso es solo el principio de una serie de aventuras que, en esta primera entrega, llevara a estos seis amigos, y a nosotros con ellos, hasta Escocia, para intentar dirimir un antiguo enfrentamiento entre dos clanes, antes de participar en un concurso de altos vuelos con un fabuloso premio.
Desde su aparición en un mini-relato, el intrépido niño y su cocker se han convertido en los compañeros de aventuras de varias generaciones.
Bill y Bolita se inscribe en un género ampliamente desarr
BILL Y BOLITA 1959-1963. Desde su aparición en un mini-relato, el intrépido niño y su cocker se han convertido en los compañeros de aventuras de varias generaciones. Bill y Bolita se inscribe en un genero ampliamente desarrollado en los Estados Unidos, pero la serie no es unicamente otra variacion sobre la vida cotidiana. Jean Roba, su creador, ha querido que sea una cronica domestica vista a traves de los ojos de un perro. Y no de cualquier perro, ya que se trata de Bill, su propio cocker, acompañado de su hijo Phillipe, apodado Boule (Bolita). Es un ejemplo de como llegar a una obra universal, a traves de lo mas personal.
Desde su aparición en un mini-relato, el intrépido niño y su cocker se han convertido en los compañeros de aventuras de varias generaciones.
Bill y Bolita se inscribe en un género ampliamente desarr