Este estudio crítico e irritante del psicólogo israelí Joel Elizur y del terapeuta de familia Salvador Minuchin de Estados Unidos pone al descubierto los efectos deshumanizadores de los sistemas de la asistencia instucionalizada de la salud mental. Este estudio comenzo como una indagacion mas bien teorica sobre los cambios que se podian observar en el sistema familiar y social en el que vive un enfermo mental. Los intereses tecnicos pronto se convirtieron en una verdadera lucha para desenredar confusas ideologias, modificar prejuicios de terapeutas y aliviar la desesperacion y confusion de familiares. En cuatro casos, estudiados desde los principios de la terapia familiar, se pueden observar aqui los fallos de la interaccion entre los pacientes, sus familias, los terapeutas y la rutina de las instituciones de salud mental. "Lo que comenzo como un libro de terapia -dicen los autoresse transformo en un estudio mas bien antropologico cuando exploramos las interacciones dentro de su contexto cultural." Los cuatro casos, estudiados en ambientes tan dispares como el kibutz Israeli y la sociedad urbana de Nueva York, muestran que los problemas de la asistencia en salud mental no son especificos de determinadas culturas sino transculturales en casi todos los factores contraproducentes.