JOSE HURTADO SANCHEZ

Conocer, profundizar e investigar sobre la religiosidad de los sevillanos es adentrarse en las profundidades de la historia de Sevilla. Hasta hace unos años el estudio de la religiosidad popular no ha sido objeto de estudio en los medios universitarios españoles. Hablar de la religiosidad popular, como de cualquier otro aspecto relacionado con ´lo religoso´, era privativo de la Iglesia católica, pero ésta ´como institución y jerarquía nunca ha sido proclive a la religiosidad popular. Y, sin embargo, curiosamente nunca la ha condenado. Resulta paradójico pero aleccionador este permanente y tenso ten con ten. No es verdad que la soporte porque no tiene más remedio, pero tampoco podemos decir que, en general, la fomente. Sabe que resulta necesaria pero cree que debe permanecer en continua purificación. Se trata del caso más ambiguo pero, al mismo tiempo, más real de una respuesta consciente pero en permanente revisión a un reto y a una necesidad humana. Ultimamente se ha intentado solucionar el problema aniquilándolo. El resultado ha sido nefasto, Otros, como de costumbre, lo han fomentado o tolerado tal cual por comodidad, por inercia o por puro egoísmo y cinismo. Tampoco es la solución.