Cuando te acercas a los setenta, que no en vano se llaman en danés "los años del polvo", puedes sentir la necesidad de resumir las experiencias extáticas, mágicas, divertidas, aterradoras y conmovedoras que has tenido a lo largo de la vida. ¡Te entran ganas de desempolvar! Por eso escribí estas 70 Epifanías, que, sin ser un registro exhaustivo, resumen lo que es la poesía para mí. La energía y el humor son conceptos clave para entender los textos, pero también lo son la conciencia humilde de lo efímero y el deber artístico de aceptar lo que te ha deparado el destino.
Klaus Rifbjerg teje en Anna (yo) Anna una historia irresistible y alucinante que atrapa al lector con una prosa hipnótica que se va enredando en una trama alocada con un ritmo frenético. Anna, una mujer de la clase trabajadora danesa, deja la universidad para casarse con un diplomático mayor que ella. Tras residir en diferente países, sufre una depresión con un enfermizo deseo de matar a su hija pequeña, "lo único vivo que tengo", por lo que vuelve a Dinamarca para someterse a tratamiento. Esta trama sencilla guarda múltiples sorpresas con la irrupción de personajes secundarios que arrastran a la protagonista a situaciones disparatadas de un lugar a otro. La diversión está asegurada porque la emoción sigue a la lástima y el alivio a la incredulidad en un itinerario donde nadie sabe qué será lo próximo que hagan. Anna (yo) Anna explora la ambigüedad de la persona. La narración que va cambiando una y otra vez de primera a tercera persona, presenta a la misma Anna con diferentes percepciones ante lo que le sucede. El lector ve con ternura a una Anna pasional y alocada frente a la Anna racional y fría, luchando por aclarar su personalidad. Anna (yo) Anna muestra la depresión de una mujer de 35 años y se convierte en una indagación de la naturaleza humana y el reconocimiento de cada cual con sus actos y sentimientos contradictorios, en una novela que se lee sin que se note el paso del tiempo.
El danés Klaus Rifjberg, uno de los poetas vivos más importantes del siglo XX, consigue a través de su poesía trazar un retrato irónico y agudo de la realidad histórica y social de nuestros tiempos.