Publicacions de la Universitat de València 9788437087818
En el inicio de los tiempos modernos, la nobleza catalana asumió prácticas de acumulación de la propiedad que reconfigurarían su propia representación genealógica. La intensa movilidad social que caracteriza a la nueva aristocracia, sus estrategias e intereses, inciden en este proceso de consolidacion patrimonial, de la misma forma que lo hacen tambien los privilegios de exclusion que dividen a estas familias. Los origenes sociales dispares de esta nobleza radicada en la ciudad, los acuerdos y fricciones entre nucleos de autoridad familiar y parientes desposeidos, el uso de las normas y la extincion de los linajes, permiten construir dos tipos de genealogia, una identificada con la acumulacion y otra supeditada y hasta olvidada. La apariencia, el ritual, las redes de lealtad constituyen practicas que juegan a favor de la primera, cautiva de la lucha por la propiedad.