En esta Obra se analiza el pasado, presente y futuro del cine latinoamericano usando como punto de partida cien de sus producciones más representativas. El título del libro fue tomado del filme homónimo del cineasta brasileño Glauber Rocha, por considerar que el continente americano responde, en materia de cine, a un perpetuo trance "cargado de sentido", segun indico Alberto Elena, uno de los quince autores. Las peliculas comentadas en Tierra en trance fueron seleccionadas por su valor como referentes de epocas, paises y tendencias, y no por su excelencia artistica. En la primera parte del libro, llamada "Tradicion y renovacion", se delinean las caracteristicas de la "edad de oro" del cine mexicano, argentino y brasileño (entre las decadas de los 30 y 50), cuando las figuras clave del cine eran Cantinflas, Dolores del Rio y Maria Felix y se producia, segun Elena, un cine "comercial y sin gran personalidad... muy mimetico respecto a las peliculas de Europa y Estados Unidos". La segunda parte se llama "Nuevos cines" y se refiere a los aires que refrescaron la cinematografia latinoamericana a partir de la segunda mitad de los 50, cuando el cine del continente empezo a reflejar influencias de directores como Bergman o Antonioni, proceso que se completaria en los 60 con nuevas propuestas como el "cinema novo" brasileño y las tendencias originadas en Cuba con la revolucion, que contribuyeron a hacer del cine latinoamericano de los 70 uno de los mas galardonados a nivel mundial, al enfrentar con gran calidad los temas politicos y rechazar los esquemas comerciales. "Perspectivas", la tercera parte, se refiere al cine de los ultimos 25 años, cuando se diluye el aspecto politico en un temario mucho mas amplio, perfilandose un "espiritu continental" y gestandose la creacion de escuelas de cine con marcadas tendencias originales.