Sintiéndose ignorado por la gente, Bill consigue una dentadura para patos con la que cambiar su aspecto. Sus nuevos dientes no tardan en convertirse en la comidilla de Patolandia... hasta que sus molares lo convierten en un maniaco abusón. ¿Habrá mordido Bill más de lo que puede masticar?.
Es el día más caluroso del año y Patolandia es un horno: ¡se ha terminado el helado y un corte de luz ha acabado con el aire acondicionado! Por suerte, Bill tiene un astuto plan: un peligros viaje a Pantanobosque. Pero, ¿por qué necesita una carretilla? ¿Y quién es el misterioso pingüino que le acompaña derretido de calor...?
Tras quedar inconsciente en un choque de moto, Waddle se vuelve " salvaje " como sus antepasados. Pero se ve en apuros cuando acaba en lo alto de una valla publicitaria. ¿Cómo podrá rescatarlo Bill? ¿Y cómo se las ha arreglado para llegar hasta allí arriba?
Bill se siente tan culpable por aplastarle la pata a Raúl que permite que el molesto cuervo se quede a vivir con él hasta que se cure. Pero pronto Bill empieza a pensar que, tal vez, el cuervo le engaña y no tiene tan mal la pata. ¿Recibira Raul su merecido? ¿Y quien es el" doctor Verdoso" ?
Bill se lleva el susto de su vida cuando pierde las plumas de la noche a la mañana. Ante la perspectiva de pasar un mes encerrado hasta que le crezcan de nuevo, solicita la ayuda de Madame Bevousky. Pero, ¿quién es esa mujer? ¿De verdad podrá salvarle de su desplumado estado?
Bill encuentra un huevo en el Estanque Central y decide cuidarlo e incubarlo ante las protestas de Aldo que considera que le dedica demasiada atención. Pero, ¿de qué es el huevo? ¿Será de verdad un huevo de pato? ¿Tendrá razón Aldo y será de caimán?.