El que ha nacido por segunda vez se parece a un manantial viviente del que fluye un agua pura y en cuyas riberas vienen a instalarse plantas, animales, hombres, toda una civilización. Su religión es la verdadera religion del amor divino y de la sabiduria divina. El universo es para el el verdadero templo de Dios, cuyo gran sacerdote es el sol, y los astros las lamparillas. El que ha nacido por segunda vez consigue abrir y liberar en si mismo todos los canales sutiles a fin de absorber las corrientes celestiales. Representa el prisma perfecto que distribuye las siete fuerzas beneficas en todo su ser y las proyecta para el bien de todos los que estan a su alrededor. Sabe utilizar el poder del fuego sobre el agua. Estudia la verdadera alquimia, la verdadera astrologia y la verdadera Cabala que se encuentran, primeramente, en el mismo. Esta atento a todos sus gestos y a todos los movimientos que hace con la cara o con el cuerpo. Vigila todas sus palabras con el fin de convertirse en un verdadero mago blanco. El hombre que ha nacido por segunda vez entiende la leccion de las abejas que son un magnifico ejemplo de sociedad superior y saben preparar la miel: trabaja para que la idea de la fraternidad universal se extienda sobre la tierra y aprende a elaborar la miel espiritual en su propia vida.
Para la mayoría de los hombres y de las mujeres que se preparan para ser padres y madres, la constitución de su hijo, su carácter, sus facultades, sus cualidades, sus defectos, dependen del azar... o de la voluntad de Dios, de quien no tienen una idea muy precisa. Como han oido hablar de las leyes hereditarias, suponen que este hijo se parecera fisicamente y moralmente a sus padres, a sus abuelos, a un tio o a una tia. Pero no piensan que esta en sus manos el favorecer o impedir este parecido, y de una forma general, contribuir al buen desarrollo de su hijo, tanto en el plano fisico como en el psiquico o espiritual. Pues bien, es ahi donde se equivocan. Los padres pueden influir favorablemente sobre el hijo que va a encarnarse en su familia.
"La felicidad es como una pelota tras la que se corre, pero que en el momento de atraparla se le da un puntapié... ¡para después seguir corriendo tras ella! En esta carrera, uno se siente estimulado; y es en esta busqueda, en este impulso por alcanzar el objetivo, donde se encuentra la felicidad. No hay duda de que cuando alcanzamos lo que deseamos somos momentaneamente felices, pero inmediatamente despues sentimos un vacio, buscamos aun mas y nunca se esta satisfecho. Por esto, ¿que hay que hacer? Hay que lanzarse a la busqueda de todo aquello que esta aun mas alla y es mas irrealizable: la perfeccion, la inmensidad, la eternidad. Y por este camino encontrareis todo lo demas; el conocimiento, la riqueza, el poder, el amor... Si, los tendreis sin ni siquiera pedirlos ."