Serge Michel es periodista. Ha sido corresponsal en Teherán, donde su trabajo para Le Figaro, Le Temps y Le Point le valió el premio Albert Londres en 2001. Es corresponsal de Le Monde en África Occidental.
Recibe novedades de SERGE MICHEL directamente en tu email
Entre 1980 y 2005 el comercio bilateral entre China y África se multiplicó por cincuenta y en 2006 había 900 empresas chinas operando en territorio africano. Dos prestigiosos periodistas franceses, Serge Michel y Michel Beuret, ofrecen una reveladora visión de lo que la creciente presencia china en África significa para los dos continentes: el apetito de China por sus materias primas ha puesto en marcha una transformación tan decisiva como la descolonización. Los chinos seducen a los dictadores porque invierten y no hablan de democracia, y a los pueblos porque construyen carreteras y casas. ¿Van a permitir los occidentales quedarse en segundo plano? ¿Cuáles son las consecuencias ecológicas de esta nueva fiebre del oro? ¿Cómo reaccionan los africanos? ¿Cómo se produce el encuentro de dos mundos tan diferentes? Los autores de este apasionante documento, investigación y relato al mismo tiempo, han recorrido quince países en busca de estos nuevos colonos, desde los bosques amenazados de Congo y los karaokes de Nigeria hasta los oleoductos de Sudán y los ferrocarriles de Angola.
Lejos de los clichés y de las promesas apocalípticas difundidas por los medios de comunicación, Serge Michel y Paolo Woods revelan un Irán inesperado: el que no se ve, el que no se muestra. Este trabajo de campo, fruto de numerosas entrevistas y de sus largas estancias en Irán, la última de las cuales, en junio de 2009, les situó en el centro de la revuelta postelectoral, muestra una sociedad muy distinta de la uniformidad velada que se ha convertido tópico desde la Revolución islámica. Por el contrario, emerge una sociedad desgarrada, sorprendente, con ansia de libertad y que sigue cultivando esa sofisticada forma de cortesía en la que «bienvenido a mi casa» se dice «puedes pisar mis ojos».