El hombre que vendió su propia cama es el segundo libro consecutivo de relatos de Vicente Molina Foix tras su celebrado Con tal de no morir, y en él vuelve a brillar la peculiar fusión de lo cotidiano y lo extraño, lohumoristico y lo patetico, en titulos como A su edad, una incisivaparabola contemporanea, o Un sueño de la diosa, con su sugestivotrasfondo hindu. Una muchacha con un perfume citrico y un critico decine amargamente autocritico acompañan la perplejidad del viajeroprotagonista de La ciudad dormitorio, mientras que las crisisconyugales adquieren perfiles turbadores en El cuento de Gogol y El buda bajo el agua.El libro agrupa en su segunda mitad cuatro extensos relatos que suponen un original homenaje o guiño a Henry James, ya que, partiendo de lasocurrencias y esbozos que el novelista americano anoto en sus diarioscomo posibles argumentos de narraciones que nunca escribio, MolinaFoix ha desarrollado cuatro de ellos, trasponiendo los apuntes del Maestro a una saga familiar de trepidante peripecia cosmopolita (La segundaboda), a la conmovedora historia de amor con secreto literario de unapareja de profesores ingleses (Los otros labios), a la carrera de un pintor tan presuntuoso como huidizo (El cuadro familiar), y, en elextraordinario cuento que da titulo al conjunto, a la relacion, cargada deresonancias historicas, que un hombre mantiene, a traves de unosmuebles, con su pasado y con el porvenir de sus ilusiones.Escritos con el habitual humor impasible del autor de El abrecartas, esta nueva coleccion de cuentos revalidara sin duda la acogida entusiasta que tuvo en 2009 Con tal de no morir: Hay algo muy calido en estas paginas que nos abriga, es el aliento de alguien que no tiene miedo a contar laverdad sin pelos en la lengua, pero sin querer amargarnos, sino tratando de elevarnos por encima de nuestras pequeñas miserias, enseñandonos a no aburrirnos nunca (Clara Sanchez, El Pais); Un enorme talento paracrear situaciones y ambientes, con personajes donde la extravagancia y la comicidad no hacen mas que acentuar un hondo sentimiento dedesarraigo y desolacion (J. A. Masoliver Rodenas, La Vanguardia); Una muy satisfactoria sesion de lectura, rica, compleja, con diferentes formas de sutileza (J. M. Pozuelo Yvancos, ABC); Relatos en plena libertad ymadurez narrativas, y, sobre todo, en verdadero estado de gracia literaria (Javier Goñi, Mercurio).Digamoslo ya: el nivel de los nueve cuentos es elevadisimo cinco de ellos fuera del ciclo titulado A partir de James, pero hay dos excelentes, fuera de lo comun La elegancia narrativa y el tono siempre educado y sugestivo, aun en momentos donde podria recurrirse a la truculencia sin desentonar, sobrevuelan estos relatos como si una invisible brida tirase del narrador El cuento se reivindica una vez mas gracias a este volumen de Vicente Molina Foix, muy recomendable (Andres Pau, Levante).Condensa la plenitud y el enganche de una gran novela en historias breves, pero ricas en todo, desde el primer parrafo Como los rusos de la primera narracion de este libro, tambien el puede ser uno de esos autores que el lector ame para siempre (Patricia Blanco, La Voz de Galicia).En El hombre que vendio su propia cama Vicente Molina Foix repasa, con su maestria habitual, la cotidianidad de la vida, los grandes dramas y las grandes comedias que se ocultan en los momentos mas insignificantes a primera vista (Maria Martin, Tiempo).
Ver más