En los orígenes del reino de Pamplona aparece la presencia, y la influencia, de una gran familia, los Banu Qasi, vascones islamizados, parientes directos de Eneko Aritza y descendientes de un linaje de reminiscencias romanas, los hijos de Casio. Con su poder y su vinculación con los califas de Córdoba, prestaron una importante ayuda al reino navarro en sus comienzos y en el enfrentamiento con los enemigos francos. Fue una relación conflictiva, pero fructífera para los navarros que estrenaban su independencia.