Un exuberante y decadente jardín es el testigo mudo de las intensas relaciones que unieron a un joven judío, narrador de esta unviersal novela de Giorgio Bassani, con los hermanos Alberto y Micòl Finzi-Contini. Los contactos con la altiva familia israelita, esporádicos al principio, se intensificaron tras la proclamación en la Italia de Mussolini de las "leyes raciales" que obligaron a los judíos a eludir sus diferencias sociales en un afán de urgente integración y búsqueda de calor humano.