El libro es un conjunto de historias delirantes, de las que se desprende el humor más fino y absurdo dando lugar a las improvisaciones más disparatadas. Para Tip y para Coll cualquier excusa es buena para entablar una conversación. El tema puede ser grandilocuente. Hablan de la memoria, la docencia o incluso del lenguaje. No se olvidan de los objetos más sencillos, como una silla, una televisión o un paraguas. El tema es lo de menos, lo que importa es robar una sonrisa al público. Los diálogos �ellos los llaman «dialocos»� son rápidos, amenos y en algunos casos pueden llegar a ser desconcertantes.