Cuando León Trotski leyó El talón de hierro a instancias de una hija de Jack London, muchos años después de la aparición de la novela y de la muerte de su autor, se declaró sorprendido y admirado por lo que creyó que había sido una brillante anticipación del fascismo.Han tenido que pasar muchos años más para que lo profético de esta novela alcance toda su verdad y todo su relieve; pues lo que London imaginó en verdad fue esta fase de gran opresión capitalista “democrática” que el mundo está viviendo durante las últimas décadas bajo el “talón de hierro” del Imperio Norteamericano. Su profecía no fue, pues, propiamente, la de la irrupción del fascismo en la escena mundial en aquellos años que desembocaron en la Segunda Guerra Mundial, sino que él hizo y mostró su descubrimiento de la entraña venenosa del capitalismo “democrático”, capaz de albergar en sus urnas todo un mundo de horrores, bajo la enseña del mercado y de la globalización. Es el huevo de esta serpiente lo que London “vio” en su imaginación de gran novelista. ¿Las urnas de la democracia serían, entonces, una especie de sucursales de la Caja de Pandora?Entre los admiradores de esta insólita novela hay que contar, además de a Trotski, al gran escritor Anatole France, que hizo un prólogo entusiasta para la primera edición francesa, y a Howard Zinn, que ha escrito el prólogo de ésta. (Alfonso Sastre)
Ficha técnica
Editorial: Hiru Argitaletxea
ISBN: 9788495786456
Idioma: Castellano
Número de páginas: 339
Tiempo de lectura:
8h 4m
Encuadernación: Tapa blanda
Fecha de lanzamiento: 06/06/2012
Año de edición: 2012
Plaza de edición: Es
Colección:
FICCIONES
FICCIONES
Número: 19
Alto: 18.0 cm
Ancho: 12.0 cm
Peso: 300.0 gr
Especificaciones del producto
Escrito por Jack London
San Francisco, (1876-1916). Jack London trabajó desde muy joven en los oficios más dispares, desde marino y pescador hasta periodista. Máximo exponente del realismo estadounidense, ya con su primera novela obtuvo un gran éxito popular, que se extendió a lo largo de toda su producción literaria. Sus obras retratan la exploración de la relación entre naturaleza y civilización, en clara inspiración nietzcheriana, y están dotadas de un transfondo autobiográfico en el que el destino ineludible es la muerte y el fracaso.