La novela narra la historia del triunfo y la desgracia de una joven dotada de una bellísima voz, Gaviota, que logra un éxito rotundo en los escenarios de Madrid y Sevilla y se enamora de un torero que muere en la plaza.
La larga vida de Cecilia Böhl (1796-1877) recorre los principales episodios históricos del siglo XIX: desde la Guerra de la Independencia que afectó directamente a las circunstancias familiares durante los años de su formación, hasta la revolución del 68 que le obligó a abandonar las dependencias del Alcázar sevillano, cedidas por la reina para su alojamiento. A esta dilatada trayectoria vital corresponde una producción literaria cuantiosa, sólo superada en el terreno epistolar por Juan Valera, entre los españoles de su siglo. Sus numerosos escritos fueron firmados casi siempre como Fernán Caballero, nombre tras el que se ocultaba la autora. Su formación extranjera la distinguía de sus contemporáneos en fundamentos estéticos, influencias y lecturas. Al margen de su contribución a las letras, Cecilia Böhl fue un personaje fascinante que pasó toda su vida fantaseando sobre su alteridad literaria, hasta el punto de que con el paso de los años dejó de distinguir la realidad de la ficción que quiso construir sobre sí misma.