La investigación criminal es sin duda, un asunto muy atractivo para cualquier amante de la Ciencia . En Tras el hilo escarlata. Ciencia Forense en Baker Street, se ha trabajado sobre un caso de Sherlock Holmes, el primero en el que actúa junto a Watson, describiendo las pruebas de las que se disponía en 1887, con la intención de compararlas con las utilizadas en la actualidad.Emprendemos un viaje desde el siglo XIX, al XXI para describir los procedimientos y sus bases científicas en cada momento.Llama la atención el minucioso trabajo de los grandes Maestros y la precaución con la que interpretaban sus resultados. Esa precaución y prudencia es algo que hoy en día, lamentablemente, se olvida con relativa frecuencia.Podemos ser partícipes de la gran diferencia en cuanto a medios técnicos que sin duda, redunda en una mayor eficacia. Pero también se comprobará la necesidad de conocer a fondo las debilidades de los procedimientos, para no ser cómplices de una injusticia. De hecho ni siquiera el todopoderoso ADN es capaz de resolver por sí solo un asunto criminal. Es más, como se dice en el texto el endilgarle esa responsabilidad puede conducir a cometer una tremenda injusticia. Y es que el ADN evidentemente, no miente, El que lo hace, supongo que sin querer, es quien extrae conclusiones precipitadas, sin tener en cuenta el resto de circunstancias del caso.De forma que debemos mantenernos aislados, observar, no sacar conclusiones irreflexivas, seguir un buen método, unir todos los datos, analizar y a partir de ese análisis, obtener las conclusiones junto con su necesaria crítica. Elemental
PRÓLOGOS
Antonio A. Cantu
Jose Antonio Murillo Pulgarín
1. LA QUÍMICA COMO CIENCIA FORENSE
2. CARACTERÍSTICAS DIFERENCIALES DEL TRABAJO EN QUÍMICA FORENSE. ASPECTOS PARTICULARES DE LAS MUESTR
Los avances tecnológicos basados en el amplio campo de las Ciencias Físicas, están introduciendo cambios espectaculares en la investigación de la escena del crimen. Probablemente, en las dos últimas décadas se han introducido tanta cantidad de nuevas técnicas y mejoras en los métodos, como las que se aportaron en los últimos cien años. Estas técnicas han cambiado de formas radical la investigación del crimen, ya que, aunque el trabajo investigador que depende de la policía sigue siendo muy importante, los Tribunales confían cada vez más en las habilidades del científico forense para que proporcione evidencias físicas objetivas e irrefutables.
a Química es un pilar básico de la investigación criminal. A la vez es un gran desconocido (e incluso temido) Por un lado las series de televisión nos la presentan como algo mágico, capaz de resolver cualquier caso, por difícil que parezca. Los del laboratorio son infalibles y siempre encuentran la solución del caso. Pero quienes estamos en ellos conocemos sus límites, que existen y no son pocos.En el Manual se revisa el trabajo de los químicos dedicados a la criminalística. Se ha tratado de revisar de forma objetiva los métodos y procedimientos, con sus ventajas y sus carencias. A su vez se ha tratado de incluir bibliografía reciente sobre cada capítulo, actualizando hasta el último momento.