La autotraducción ha sido tradicionalmente considerada una práctica poco frecuente en el terreno traductológico, aunque la historia literaria alberga una larga lista de autores bilingües que han vert
El presente libro le concede a la actividad autotraductora la atención que se merece por ser instrumento de entendimiento entre pueblos. La (auto)traducción como medición entre culturas será de interés tanto para traductores profesionales como para los que se inician en este campo, así como para intérpretes, para filólogos y para los que, de una u otra forma, se dedican al estudio del lenguaje y hacen posible la mediación entre distintas culturas.