Pluma en ristre recoge escritos de Leonardo Castellani que hasta ahora habían permanecido inéditos en forma de libro. En ellos derrocha el ingenio y la profundidad analítica que le han convertido en un autor de referencia en Argentina y, ahora tambien, en España. La extraordinaria calidad literaria de su obra ha conquistado tantos lectores, o mas, que su amplitud tematica, que abarca desde la teologia y la filosofia a la politica y la cronica cultural. De el puede decirse con propiedad, conforme a la sentencia clasica, que nada humano le era ajeno.
Concebida como una suerte de novela de tesis, 'Los papeles de Benjamín Benavides' participa del diálogo platónico, la sátira de costumbres y hasta de la intriga policial; pero es, por encima de todo, una apasionada vindicación del propio autor, transustanciado en Benjamín Benavides, ese judío sefardí, tozudo y quijotesco, preso en el campo de concentración de Cinecittá durante la primavera de 1947, que tras haber sufrido mil penalidades, se dispone a alumbrar a un variopinto grupo de amigos (a su vez, trasuntos de personajes que Castellani trató, en diversos momentos de su vida) las profecías parusíacas del Apocalipsis. Hemos escrito 'profecías', a despecho de las tesis racionalistas que pretenden presentar el último de los libros sagrados como una 'filosofía de la historia tesis contra la que Castellani se rebela, con la violencia y el sarcasmo propios de su genio: 'es una gracia -leemos en algún pasaje de este libro irrepetible- que Dios se haya puesto a hablar a los hombres; y que puesto a hablar, haya dicho cosas menos importantes que las que ya sabían los hombres'.
Leonardo Castellani vuelve a regalarnos un libro de ortodoxia absoluta aunque de tono siempre algo polémico. El Evangelio de Jesucristo no dejará indiferente a ninguno de sus lectores y a todos hará reflexionar con un nuevo enfoque y espíritu sobre pasajes aparentemente ya sabidos. En palabras del propio Castellani, este libro sólo "contiene los comentarios sencillos y breves de las domínicas de todo el año", siendo eso sí a la vez, estudio rigurosísimo de la historicidad del Evangelio y de sus contenidos. Fiel a su estilo único, original y profético, los comentarios irónicos del jesuita argentino se ajustan perfectamente a la situación cultural contemporánea-por algo pensaba el autor que los humanos vivimos siempre en tiempos de crisis. La maestría del escritor en el dominio de la exégesis y de la pluma quedarían solamente en eso si no fuera por la profundidad de sus meditaciones.