En el Museo del Prado, un extraño individuo ataca con ácido una de las obras maestras del arte universal: El jardín de las delicias, de El Bosco. Al ser detenido confiesa ser un monje dominico danés, lo que añade aún mayor misterio al extraño atentado. Antonio de Nebrija, restaurador del museo, investiga el caso junto al especialista alemán Michael Keie. Sus pesquisas les llevan hasta un manuscrito escrito en 1511 por petronius Oris, colaborador de El Bosco, en el que se detalla el proceso de elaboración del cuadro. Pero resolver el misterio no les resultará nada fácil...¿Por qué el monje danés trató de dañar sólo partes concretas del cuadro? ¿Qué se oculta en realidad detrás de El jardín de las delicias? ¿Cómo es posible que la inquisición no hiciera nada contra una obra que celebra abiertamente los placeres de la carne?
La trágica historia de este genio de la pintura, ludópata, bebedor y amante, que pasó toda su vida como una vela que arde por ambos extremos. Michelangelo Merisi, el Caravaggio, no conoce ni acepta ningún límite. Su hedonismo termina por destruir su salud, y su irascible violencia lo lleva a prisión continuamente. Gracias a sus cuadros, se convierte en el pintor más famoso del folclore popular de principios del siglo XVII, al tiempo que el Vaticano lo condena como hereje. En los últimos años de su vida sus amigos pueden contarse con los dedos de una mano. Entre ellos se encuentra Nerina, una joven pintora que le dibujó varias ambientaciones y lo salvó más de una vez de sus enemigos del Vaticano. En su ajetreado viaje de Roma a Malta, pasando por Nápoles, Nerina empieza a darse cuenta cada vez más claramente de que algún suceso en el pasado del pintor provocó una fuerte enemistad con un hombre… y que no permitirá que lo ayude a escapar. Para acusar a su potencial enemigo ante la posteridad, el Caravaggio lo pinta en su cuadro La decapitación de San Juan Bautista y se lo da a Nerina, poniendo así su vida en peligro.