Sinopsis de MEMORIAS CONFESABLES DE UN EMBAJADOR EN EL VATICANO
¿Cómo repercute en nuestras relaciones internacionales el hecho de que un Partido Socialista esté en el poder? ¿Cómo influye este aspecto en la Cuba de Castro o en el Vaticano? ¿Qué papel juega la diplomacia ante conflictos como los que atañen a la nunca resuelta asignatura de Religión? ¿Y ante cuestiones espinosas de protocolo como en la visita de Ibarretxe y Mayor Oreja a la Santa Sede? ¿Cómo se vivió en la Embajada de España la pastoral Preparar la Paz de los obispos vascos? ¿Cómo es la vida de un diplomático en Miami, Kenia, Estocolmo, Roma...? Don Alfonso de Borbón, la Familia Real española, José María Aznar, Mariano Rajoy, Emanuela de Dampierre, el Gran Maestro de la Orden de Malta, Javier Solana, Adolfo Suárez, el Gran Rabino de Roma, los Cardenal Rouco, Cañizares y altos cargos de la Curia romana, Jefes de Estado y grandes Casas Dinásticas de la historia reciente dan paso, en estas Memorias confesables, a los recuerdos de la vida diplomática del que fuera Embajador ante la Santa Sede durante los últimos siete años y medio de pontificado de Juan Pablo II.
Ficha técnica
Editorial: Libroslibres
ISBN: 9788496088504
Idioma: Castellano
Número de páginas: 496
Tiempo de lectura:
11h 51m
Encuadernación: Tapa blanda
Fecha de lanzamiento: 24/05/2006
Año de edición: 2006
Plaza de edición: Madrid
Especificaciones del producto
Escrito por Carlos Abella y Ramallo
(La Coruña, 1934) ha ocupado varios puestos del escalafón diplomático durante cuarenta años ininterrumpidos de servicio diplomático, desarrollado en cuatro continentes. Entre otros cargos, ha sido Cónsul General en Río de Janeiro, Ministro para Asuntos Culturales en la Embajada en Washington, Embajador en Kenia, Embajador para el V Centenario del Descubrimiento de América, Inspector General de Servicios y Cónsul General en Miami, antes de alcanzar por fin la Embajada de España ante la Santa Sede, cargo que cubrió durante los últimos siete años y medio de pontificado de Juan Pablo II. Actualmente, aunque ya jubilado, sigue desempeñando las funciones de Gentilhombre del Papa.